Sí, puede que sea un poco rara, y quizás sea eso lo que me hacer ser especial. Me gustan las personas que me hacen reír, y la sinceridad. Odia los días de lluvia,aunque me gusta ver la lluvia caer en mi ventana y esa olor a cesped mojado que se queda, adoro el sol, me gusta andar descalza por la playa y sentir el contraste de la arena caliente con las olas del mar, odio los sabelotodos y la prepotencia, la gente que se cree superior. Adoro comer chocolate, e ignorar sus calorías. Me gusta comportarme como una niña, y que entren en mi juego. Me gusta la sencillez, y que me entiendan con una mirada. Odio que me vean llorar, excepto si se trata de mi almohada. Y me encanta estar con esa persona tan especial para mi. Y alegrarles el dia a los personas que quiero con mis tonterias.

Y es que no soy normal, y me enorgullezco de ello

sábado, 10 de septiembre de 2011

No dudes en perder una batalla si esto te lleva a ganar la guerra

Sé que estás atado, que tienes miedo, se que sufres en silencio y que intentas parecer despreocupado y feliz, se que la rabia invade tu cuerpo y que las ansias de libertad poco a poco fueron ganando territorio en ti, y que eres un incomprendido, capaz de dejarse la piel en el intento y que poca gente te quiso y los que te quisieron alguna vez te hicieron daño, se que intentas ser positivo aunque predomine el lado malo, que intentas gritar por todos los medios pero no te sale la voz, se que te sientes atrapado, incómodo, que piensas que el control no es ni seguro ni eficaz, se que te tembló la voz cuando fuiste a hablar con ella, y que tus ojos estaban vidriosos cuando no te quiso escuchar, y solo conseguiste ver la forma en la que se excusaba para irse rápidamente, se que te pueden las ganas de llorar, y sé que no llorarás delante de nadie, y que tu habitación será el único testigo de que la vida para ti no es fácil

Escucha, la meta está allí donde tus pasos alcancen.

¡Vaya que reñir por una cosa tan remota, por lo que quizás no suceda! Perdóname. No puedo remediarlo. Yo ¿qué culpa tengo?Cuando menos se piensa, pienso cosas que no debe una pensar...Pero no hagas caso. ¡Qué tontería, angustiarnos por lo que no existe, por lo que no sabemos si existirá, teniendo un presente tan fácil, tan bonito, para gozar de él!
¿Sabes que es lo mejor de los corazones rotos? Que sólo pueden romperse de verdad una vez. Lo demás son rasguños.



Es más la sed que el miedo al veneno