Sí, puede que sea un poco rara, y quizás sea eso lo que me hacer ser especial. Me gustan las personas que me hacen reír, y la sinceridad. Odia los días de lluvia,aunque me gusta ver la lluvia caer en mi ventana y esa olor a cesped mojado que se queda, adoro el sol, me gusta andar descalza por la playa y sentir el contraste de la arena caliente con las olas del mar, odio los sabelotodos y la prepotencia, la gente que se cree superior. Adoro comer chocolate, e ignorar sus calorías. Me gusta comportarme como una niña, y que entren en mi juego. Me gusta la sencillez, y que me entiendan con una mirada. Odio que me vean llorar, excepto si se trata de mi almohada. Y me encanta estar con esa persona tan especial para mi. Y alegrarles el dia a los personas que quiero con mis tonterias.

Y es que no soy normal, y me enorgullezco de ello

viernes, 13 de mayo de 2011

Catorce de enero del dos mil once

Algunas tardes no deberían acabar nunca. Deberían ser algo así como...interminables, dónde el sol no terminase de bajar del todo y esa luz espectacular de las 8 y algo de la tarde lo bañase todo para siempre. 
Tardes en las que las horas pasasen en nuestra cama y en dónde las risas, y sonrisas, resonasen en el aire continuamente entre nosotros dos.
Me quedo con las tardes en las que estabamos los dos y nadie más para molestarnos, para deleitarse con nuestros suspiros o el movimiento de nuestros dedos sobre el cuerpo del otro.Porque para mi una tarde perfecta es tan solo estar a tu lado.

PD: te quiero
Es más la sed que el miedo al veneno